Saltar el muro

En el anterior encuentro, hablamos de perros, de madres, de hijas, de sectas, bloqueos y hasta de nosotros mismos.
Una constante:
el Miedo.
Miedo a ser, a fluir, a confiar...Y un deseo:
Saltar el muro, romper barreras. No dejar que nuestra enfermedad nos encasille, nos condene al ostracismo, al abismo.
Y un denominador común:
La exposición de nuestras emociones más primitivas: _EL QUERER Y SER QUERIDO.
Donde, a pesar de nuestra vergüenza, destapamos lo que en otros marcos, no nos atrevemos a exponer, por ser observados, condenados o clasificados.
Y hablamos:
De saltar el muro, ser libres.
Ser libres de las ataduras que a veces nos imponemos, de no buscar la perfección constantemente, la benevolencia de la gente, preservando nuestro presente, atentos al mundo que nos rodea, aligerando nuestra mente, sin acusarnos tan duramente.
Algunos ganamos premios, otros, el cariño de los nuestros. Yo, cerrando frentes.
Y un programa en la radio:
Es como no ver, es sentir, que alguien se puede beneficiar... de nuestro afán de sanar.

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